Conocer y actuar sobre nuestras áreas de oportunidad son aspectos fundamentales para mejorar tanto a nivel personal como laboral, por esta razón, aquí te enseñaremos qué son las áreas de oportunidad, cómo identificarlas, potenciarlas en nosotros mismos y nuestra empresa y cómo el hecho de adoptar mejores hábitos nos ayudan a lograrlo.

Son habilidades que podemos adquirir para alcanzar nuestros objetivos y conseguir nuevas oportunidades, bien sea a nivel personal o laboral. 

Algo muy importante para el desarrollo de dichas habilidades es el autoconocimiento constante. De esta manera podemos afianzar nuestras virtudes y trabajar en nuestras nuevas áreas de oportunidad personal. 

El autoconocimiento es el primer paso que nos permite identificar nuestros malos hábitos y de esta manera poder trabajar en nuestros puntos débiles, así lograremos convertirlos en puntos fuertes y mejorar nuestra vida personal y laboral.   

Una oportunidad puede estar relacionada con un objetivo planteado y anhelado. Entonces, al hablar de área de oportunidad, es recomendable evaluar en qué ámbito se desarrolla. Normalmente hablamos de oportunidades en el ámbito personal y laboral. ¡De esto te enseñaremos más adelante!

Ahora ya sabemos qué son y cuáles son los tipos de áreas de oportunidad, a continuación aprenderemos cómo potenciarlas para obtener cambios y mejorar nuestra calidad de vida. Aquí te dejamos una lista de pasos para mejorar en nuestras nuevas áreas de oportunidad: 

• Autoconocimiento: este es el primer paso para potenciar nuestras áreas de mejora, conocer cuáles son nuestros principales puntos débiles y fuertes nos permitirá afianzar nuestras fortalezas, entender nuestras necesidades y trabajar en nuestras debilidades para desarrollar mejores habilidades a corto y largo plazo. 
• Análisis de experiencias pasadas: al recordar y analizar nuestras experiencias previas podemos encontrar varias lecciones de vida y aplicarlas a diario para no cometer los mismos errores del pasado. También, al hacer un análisis comparativo entre cómo éramos antes y ahora nos puede motivar progresar de la mejor manera. 
• Reconocer habilidades y virtudes: poder identificar nuestras virtudes y saber qué es lo que hacemos bien nos traerá múltiples beneficios, ya que nos puede guiar en nuestras oportunidades de mejora, porque podemos aplicar las técnicas que usamos para adquirir nuestras virtudes al momento de convertir nuestras debilidades en puntos fuertes.
• Enlistar cada una: si seleccionamos nuestras habilidades y virtudes, nos enfocamos y priorizamos aquellas en las que somos más talentosos y las vemos como oportunidades de mejora; podemos potenciarlas y acercarnos a la excelencia, lo que sin duda puede significar una ventaja en el ámbito personal y laboral. 
• ¡Ir un día a la vez!: en este último paso, tenemos que dejarnos llevar, sin dejar de hacer todo lo necesario para que las cosas que queremos se cumplan, manteniéndonos en el contexto de una situación real. Siempre tomando en cuenta nuestras habilidades que priorizamos previamente. 

Es importante conocer cómo los hábitos influyen en la expansión y potenciación de nuestras áreas de oportunidad. 

Así, si por ejemplo te gustaría escalar en tu puesto de trabajo, pero sueles levantarte tarde o justo a tiempo, no determinas horarios para cada tarea laboral ni personal, difícilmente esta puerta u oportunidad se abrirá en el contexto de una situación real. 

Al saber que tienes esa debilidad, el paso a seguir será reemplazar esos malos hábitos por las mejores habilidades que te ayuden a crecer y no repetir tus experiencias pasadas, dentro de estas están: 

• Establecer un horario para dormir que te permita despertarte más temprano.
• Hacer espacios para actividades personales (ejercicio, educación, entretenimiento).
• Organizar tu día con la ayuda de una agenda.

En otro caso en el que quieras aumentar tu conocimiento sobre un tema determinado, ya sea porque te beneficie en tu trabajo o en tu vida personal, tener los siguientes hábitos te ayudará a trabajar en esta área de oportunidad:

• Leer algo nuevo acerca de ese tema cada día.
• Conversar con personas a quienes también les interese el tema.
• Escuchar podcasts, ver películas, videos, charlas o series relacionadas con el tema. 

En otro ejemplo de una situación real, en la que te sientes abrumado por todas tus responsabilidades y quieres tener una mejor salud mental, tener el hábito de:

• Meditar.
• Hacer ejercicio.
• Comer saludable.
• Hacer el seguimiento de tus metas a corto y largo plazo.
• Evitar usar las redes sociales en exceso.

Sin duda es algo que mejorará tu forma de actuar y afrontar estos retos, aunque sean pequeñas cosas que tal vez en el día a día no parecen llevarte a donde deseas, pero que en la suma total te permitirán cumplir tus objetivos en lo personal y en lo laboral.

Ahora ya sabemos qué son las áreas de oportunidad, cómo identificarlas y  potenciarlas en nosotros mismos, tal como dice Malcom Gladwell en su libro Fuera de Serie (Outliers), «la práctica no es lo que uno hace cuando es bueno. Es lo que uno hace para volverse bueno». Por lo que continuar formándote en estas áreas y  mejorar tus hábitos cada día te ayudará a abrir nuevas puertas, es decir, mejorar las áreas de oportunidad. 

Por último, te invitamos a conocer más sobre estos temas en nuestra sección de Brainfood, en donde encontrarás contenido que te ayudará a desarrollar competencias y habilidades que te permitan crear nuevas oportunidades personales y laborales.